Cerezas seleccionadas y descarozadas, dependiendo del formato con palo y sin palo. Las cerezas al marrasquino son un clásico en las pastelerías. Su color intenso y su sabor dulce los hacen necesario como parte de tartaletas o pasteles, para acompañar desayunos, incluso necesario para deliciosas ensaladas de frutas y macedonias. También las elaboraciones saladas pueden ser acompañadas por ingredientes como las cerezas en almíbar, que aportan ese toque dulce y un color intenso.